Ha muerto mi mejor amigo. Mis ojos se han secado de tanto llorar.
El dolor, transformado, no deja de hacer daño.
Ya han pasado quince
días y apenas me alimento. Cualquier cosa me recuerda su amistad, y a él.
Estoy hospitalizado
con goteros. No quiero vivir, no sin mi amigo.
Una gran somnolencia me está invadiendo, y a lo lejos, sin mucha nitidez, me parece
verlo. Oigo su voz llamándome. El alma se me alborota. Lleva en la mano la correa, y muevo
el rabo mientras corro hacia él.
«Ven chico», me dice al
acercarme. «Ahora estaremos juntos para siempre»
Es increíble la conexión que tienen los perros con sus amos... el de mis padres, murió un mes después que mi padre... es como si ya no supiesen vivir de otra manera, sin ese "amo"...
ResponderEliminarUn abrazo
Muy bonito y emotivo.
ResponderEliminarDesde la óptica canina.
ResponderEliminarMuy bueno.
Abrazos.
Como siempre... ¡entré como el gallo ciego! No zafo una con vos, querido amigo.
ResponderEliminarApenitas empecé a leer pensé "¡Qué terrible, se le murió su perritooo!". Y a partir de allí entré como cun caballo che, me di cuenta recién en lo de la correa y el rabo... Te felicito, está bueno, y yo preocupada por mi sencillez mental, je, ante tus trucos que, si bien conozco, siempre conmigo funcionan,en fin... Un gusto haber pasado por tu blog, está muy nutrido y luce a todas luces de papel.
Te mando un beso grande.
Es verdad, Milena, se llega a tener una conexión increíble.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias por pasarte, y por tu opinión Lagrimas.
ResponderEliminarUn abrazo
Claro, Antony, es el perro quién lo cuenta.
ResponderEliminarUn abrazo.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
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ResponderEliminarMónica, qué alegría verte por estos pagos míos.
ResponderEliminarMe agrada que aún consiga sorprenderte, aunque vos no tenés sencillez mental, vos sos una verdadera maestra en poesía, que ya me gustaría a mí.
Recién estuve en tu blog y hace tiempo que no publicas ¡Anímate! Me gusta leer tus poemas, y tus aventuras.
Muchos besos para ti.
Gracias, querido Jesús.
ResponderEliminarCierto, el blog está a la buena de Dios... Su Madre ha tirado estrellas en mi puerto azul y sufro de un trastorno de personalidad místico - álmico, che, no sé como resolverlo, es decir, ¡qué lío! seguro volveré a escribir, de hecho he cambiado por completo "orfandad", hace poco, pero antes debo ordenar mi desorden, fíjate, le hice un blog a Ella por una promesa, y eso me tiene a full.
Te lo dejo como amigota tuya, aunque es ajeno a este metier de ka escribida: http://destellocelestial.blogspot.com.ar/
Besos.
Mónica (Turkesa)
¿Será ficción, Jesús?
ResponderEliminarQuizás, escribiendo ficción, has dado con la realidad...
Un abrazo,
Esther
Esther, en parte sí, en parte no.
ResponderEliminarMi mejor amigo se fue y algo me ha quedado vacío.
Un abrazo